La actividad del Talento Humano dentro de las organizaciones, ha pasado a ser uno de los elementos más importantes, signado por el factor determinante del comportamiento humano dentro y fuera de ellas, como respuesta a las exigencias del contexto social, que cada día impone más condiciones para el fortalecimiento de las políticas organizacionales, que determinarán el camino rumbo a la obtención de los resultados planeados.
Las personas por ser el factor determinante para el logro de los objetivos, presentan una serie de diferencias en la aceptación y aplicación de las políticas asumidas por las organizaciones, las cuales tendrán que ser atendidas, analizadas y dirimidas con resultados positivos por las respectivas unidades administrativas de Talento Humano.
Ante este abanico de distintos pensamientos de entender el comportamiento de las personas dentro de las organizaciones, se hace imprescindible la participación permanente de la gerencia, a objeto de que las soluciones al enrarecimiento del clima organizacional que pueda presentarse en un momento determinado, como consecuencia de las diferencias existentes entre las personas, sean guiados con aciertos para que los protagonistas del cumplimiento de las políticas, lo tomen de manera positiva, a objeto de que las mismas sean bien concebidas, digeridas y aplicadas correctamente.